Lo intento.
Y voy a nadar con Sargento de Hierro, que me empuja a ello sin piedad y con muy buena intención,
quedo con Comadres, que me dan calorcito,
busco refugio en gente cercana, de veras, y me llegan vuestros ánimos cibernéticos, también, y lo agradezco.
Y lo intento. Con uñas y dientes. Sacando fuerzas de donde no las hay. Porque ahora no las tengo.
Las que tenía ya las gasté.
Las empleé en ser valiente durante todos estos procesos, los tres, aguantando cañonazos hormonales, esperas, incertidumbres y zozobra. También hubo, claro, enormes dosis de esperanza, de risa, alegría y de amor, ¿por qué no decirlo?
Pero me siento agotada. Exhausta.
Quizá por eso, o puede que no, la tristeza hoy, en este momento, me puede.
Ánimo Rubita. Como dicen por aquí "nunca llovió que no escampó".
ResponderEliminarComo dice Casta, que llueva todo lo que tenga que llover, que pronto saldrá el sol con toda esa fuerza que seguro tienes.
ResponderEliminarSiempre hay un día gris...pero saca fuerzas para subir tus ánimos.
ResponderEliminar¡animo Rubita! es duro durísimo, tu lo sabes bien y lo ves por ahí todos los días en esos blogs, en esos procesos. flaquear es lícito, un rato... en cuanto te recuperes ¡al ataque!
ResponderEliminargracias, gracias a todas....tengo varios post en la cabeza, unos de más risa y otros menos, pero ahora mismo no puedo. Quiza pruebe con la foto, que me resulta más fácil y es de lo poco que me consuela ahora.
ResponderEliminarY enlazaré una cosilla en otro post, pa que si os hace gracia os echeis unas risas, que no quiero trasmitiros esta sensacion de bajon permanente.